Las colecciones Crucero estaban planteadas en su origen como atuendo vacacional de ricos migratorios que hibernaban en los trópicos o con yate propio. Era una colección aparte del resto y estaba dirigida a una minoría elitista, pero poco a poco se fue introduciendo en las colecciones habituales hasta llegar a ser un clásico. Si bien es verdad que muchas casas de moda han suprimido esta colección dado la crisis que sufre la moda, Karl Lagerfeld nos ha querido presentar una colección impregnada del glamour de Saint Tropez y ciertos aires setenteros.
El kaiser toco muchos palos en lo que a tendencias se refiere.
La estética retro es tendencia pero para Lagerfeld la década de los 70 toma gran relevancia, pantalones de talle alto y pata ancha.
Los tejidos vaporosos y las flores de todos los tamaños inundaron la pasarela, tanto para ellas como para ellos.
Una revisión perfecta de la denimania, combinando lo sofisticado y lo casual.
Aires tribales y referencias a diversas etnias, con gran presencia de incrustaciones.
Pailletes, de rabiosa actualidad, tanto para looks diurnos como nocturnos.
Gran uso del crochet o ganchillo para el efecto red que tan fuerte esta pegando.
Reminiscencias a los orígenes de la maison francesa a través del tweed en todas sus versiones.
Y otro clásico de la casa la combinación bicolor negro y blanco, sinónimo de distinción y sobriedad.Lo dicho, ha tocado muchos palos y muy diversos , pero reconozcámoslo, todos ellos con mucho acierto y un gusto estético impecable. ¿No lo creéis?
fotos vía WWD
